viernes, 1 de junio de 2012

Impacto tipo ojo



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Nuestro propósito


Brindarles a nuestros clientes un servicio profesional, beneficiándolos mediante el ahorro de dinero, ya que el costo de reparación es una fracción mínima del valor del parabrisas original, y de tiempo; aumentando la seguridad de los ocupantes del vehículo al mejorar la visibilidad hasta un 80 % (lo que condiciona el resultado es el tamaño de la rotura en los golpes y en las fracturas el tiempo que ha pasado desde que se rompe hasta que se repara el parabrisas); y  garantizando el trabajo realizado.
En general, podemos decir que el objetivo principal que busca una reparación es el de evitar el cambio del parabrisas, conservando el sellado hermético de fábrica y evitando el riesgo de una mala instalación por la que se filtren agua, aire o ruidos molestos.

¿Cómo se repara un parabrisas?

El procedimiento de reparación es artesanal y consiste en reemplazar todas las áreas dañadas del cristal con una sofisticada resina. Esta resina restaura la claridad óptica y la resistencia del parabrisas con una soldadura tan consistente como la del parabrisas original.

Al observar un golpe o una rajadura se suele ver en su interior un color oscuro o plateado, esto es aire que ingresó en el vidrio y que procederemos a extraer y reemplazar con una resina especialmente diseñada para la reparación de parabrisas.

  • El área dañada es inspeccionada y limpiada para facilitar remover el aire atrapado y la inyección de resina. 
  • Usando un equipo tecnológicamente diseñado para reparar parabrisas, se extrae el aire atrapado y se inyecta la resina que se filtra en las ramificaciones del golpe o fisura. 
  • Se expone la zona reparada a una fuente de luz ultravioleta (UV), endureciendo o “curando” la resina inyectada en un determinado tiempo.
  • Por último se elimina todo resto de resina sobrante y se limpia la zona reparada.